miércoles, 21 de septiembre de 2011

Proceso inflamatorio

A continuación mostraremos un video en el cual se puede apreciar el proceso inflamatorio, es decir, que ocurre desde que entra el agente externo y la reacción del cuerpo frente a este.


¡De esta manera audiovisual es mas fácil y entretenido por lo cual les aseguramos que entenderán mas claramente como actúa nuestro cuerpo frente a una reacción!

Tratamientos para la Inflamación...


El tipo de tratamiento que se debe aplicar ante una inflamación también está supeditado a las características de la zona afectada y a las causas que la hayan provocado.  
Las pequeñas heridas deben lavarse con agua y jabón, y mantenerse limpias mediante el uso de antisépticos y vendajes o apósitos estériles, para evitar una posible infección y la consiguiente inflamación que se puede producir. 

La aspirina y el paracetamol pueden reducir la mayoría de las inflamaciones y aliviar el dolor. 








Cuando la inflamación está causada por una infección bacteriana, como en el caso de una amigdalitis, es necesario un tratamiento con antibióticos.












En el caso de producirse esguinces o estiramientos musculares, el dolor y la inflamación puede aliviarse mediante la aplicación de unas compresas frías acompañadas de reposo, y de la completa inmovilización del área afectada. 














Algunas inflamaciones pueden resultar peligrosas si afectan órganos vitales, como las vías respiratorias, por ejemplo, en los ataques de asma, debiendo ser tratadas con corticosteroides. Para los eccemas, así como para tratar otras inflamaciones crónicas de la piel, suelen administrarse corticosteroides en aplicación tópica. 

Conozcamos las células implicadas en la inflamación!

Son varias las células que están implicadas en la inflamación tal como:




  • Macrófagos: son el tipo celular dominante en la inflamación crónica (es decir, permanente)Son uno de los componentes del sistema fagocítico mononuclear (un núcleo), también denominado sistema retículo-endotelial, que está formado por células originadas en la médula osea (tejido presente en el interior de los huesos largos). Los macrófagos son células residentes en los tejidos, que se originan a partir de los monocitos (glóbulos blancos) del plasma. Sin embargo, mientras que los monocitos tienen una vida media corta (1 día), los macrófagos tisulares sobreviven durante meses o años. Según el tejido en el que se encuentran, los macrófagos tisulares reciben nombres diferentes: por ejempo, los histiositos (tipo de célula animal) del tejido conjuntivo, las células de Kupffer del hígado, las células de Langerhans de la piel, los osteoclastos (células multinucleada que reabsorbe hueso) del tejido oseo, la microglía del sistema nervioso central o los macrófagos alveolares del pulmón. Los macrófagos tisulares son células centinela, conjuntamente con los mastocitos, ya que presentan receptores específicos capaces de detectar agentes infecciosos, como los receptores de tipo Toll (proteínas). La unión de estos receptores a sus ligandos produce la activación de los macrófagos, proceso que puede inducirse además por la presencia de citoquinas (proteínas) como el interferón-γ (proteína), una molécula segregada por los linfocitos T activados y por las células Natural Killer.

  • Linfocitos: son células que se movilizan en la respuesta específica del sistema inmune, activándose con el objetivo de producir anticuerpos y células capaces de identificar y destruir el microbio patógeno. Los macrófagos segregan citoquinas (sobre todo TNF e IL-1) y quimioquinas capaces de reclutar leucocitos a partir de la sangre y movilizarlos hacia la zona afectada. Las interacciones entre linfocitos y macrófagos son bidireccionales, ya que los macrófagos reclutan y activan linfocitos, y estos a su vez segregan citoquinas (sobre todo IFN-γ) con una potente capacidad de activar macrófagos. De manera que una vez que los linfocitos entran en acción, la inflamación tiende a agravarse, convirtiéndose en crónica y severa.
(Linfocitos atípicos)

  • Células plasmáticas: se diferencian a partir de los linfocitos B activados. Su función consiste en la producción de grandes cantidades de anticuerpos dirigidos contra el microbio patógeno, o en ocasiones contra antígenos endógenos (en las enfermedades autoinmunes). En algunos pacientes con inflamación crónica (como la artritis reumatoide), las células plasmáticas, linfocitos y células presentadoras de antígenos se acumulan en nódulos similares a los glangios linfáticos, que contienen incluso centros germinales bien definidos. Estos nódulos se denominan órganos linfoides terciarios.




  • Eosinófilos:  son abundantes en reacciones inflamatorias mediadas por IgE y en infecciones por parásitos. Estos leucocitos tienen gránulos que contienen la proteína básica principal , una proteína catiónica muy básica que es tóxica tanto para los parásitos como para los tejidos. Tienen por ello un papel importante en la destrucción de tejidos en reacciones inmunes, como las alergias.

  • Mastocitos: Los mastocitos, como los macrófagos, son células centinelas ampliamente distribuidas por los tejidos, que reaccionan al estrés físico (calor, frío, presión), y participan tanto en la inflamación aguda como en la crónica. En sus membranas tienen receptores para IgE, que en reacciones de hipersensibilidad inmediata, estimulan la degranulación, liberando mediadores como histamina y prostaglandinas. Este tipo de reacción ocurre en las reacciones alérgicas, pudiendo llegar a producir un choque anafiláctico. En la inflamación crónica, como presentan una gran variedad de mediadores, pueden promover o limitar la inflamación, en función de las circunstancias.



  • Neutrófilos: aunque  son característicos de la inflamación aguda, en muchos casos de inflamación crónica puede detectarse la presencia de PMN durante meses, bien debido a la persistencia de la infección o de mediadores producidos por los linfocitos. Esto ocurre por ejemplo en la osteomielitis (infección bacteriana crónica del hueso) o en el daño crónico de los pulmones inducido por el humo del tabaco y otros irritantes.


  • Inflamación granulomatosa: Es un patrón característico de inflamación crónica que sólo se encuentra en algunos casos bien definidos de inflamación crónica. Un granuloma es un intento celular de aislar un cuerpo extraño que no puede ser fagocitado. Normalmente se produce una fuerte activación de linfocitos T, que induce a su vez la activación intensa de los macrófagos. Como resultado de esta activación, se producen los granulomas, que son focos de inflamación crónica, en los que el agente patógeno está en el centro, rodeado por macrófagos transformados en células pseudo-epiteliales, rodeados por leucocitos mononucleares, sobre todo linfocitos y en ocasiones células plasmáticas. El prototipo de enfermedad granulomatosa es la tuberculosis, pero los granulomas pueden identificarse en otras enfermedades, como la sífilis, vasculitis, sarcoidosis, lepra o la enfermedad de Crohn. Se pueden detectar dos tipos fundamentales de granulomas:

  • Por cuerpo extraño: generados por materiales externos relativamene inertes, como el talco (asociado con el abuso intravenoso de drogas), suturas o otros materiales que no se fagocitan fácilmente; frecuentemente debido al uso de prótesis, material quirúrgico, sílice, berilio...
  • Inmunitario: inducido por una variedad de agentes capaces de inducir una respuesta inmune mediada por células, cuando el agente patógeno es difícilmente degradable.
El granuloma puede ir asociado a:
  • Necrosis.
    • Caseosa: producida por micobacterias.
    • Abscesificada: en la enfermedad por arañazo de gato, infecciones por bartonella...
  • Fibrosis: que limita perfectamente el granuloma como ocurre en la sarcoidosis. 
  • Linfocitos y células plasmáticas: rodeándolo.
  • Otros granulomas: no individuales, sino fusionados (tuberculosis o brucelosis).
Cuando existe mucha fibrosis se diferencia perfectamente el granuloma y se denomina sarcoidosis: enfermedad que afecta principalmente al pulmón, ganglios linfáticos, piel, conjuntiva, riñón... Otras veces se puede formar un espacio con gas; también pueden aparecer cristales de ácido úrico, que se depositan formando el granuloma (gota). Y en la tuberculosis el granuloma se caracteriza por necrosis caseosa central sin inclusiones y sin fibrosis, lo que lo diferencia de la sarcoidosis. Sin embargo, hay tantas presentaciones atípicas de granulomas que siempre es necesario identificar el agente patógeno por otros métodos: tinciones específicas, cultivos celulares, técnicas moleculares (como la técnica de Reacción en cadena de la polimerasa o PCR) o estudios serológicos.
(Sarcoidosis)

Aquí un link mas detallado acerca de la Sarcoidosis, enfermedad granulomatosa perteneciente a la inflamación:

¿Sabías que?...

Sabías que la inflamación se denomina en medicina con el sufijo -ITIS?
Conozcamos algunas de ellas!


  • Faringitis: es la inflamación de la mucosa que reviste la faringe. Uno de sus principales síntomas son problemas para tragar, fiebre y amígdalas inflamadas. 
(Faringitis viral)
  • Laringitis: Inflamación de la laringe, que tiene inicio principalmente en la noche. Esta inflamación puede ser causada por: un virus, un agente patógeno, inflamación de las cuerdas vocales, entre otros. 
(Foto referencial del área que afecta la laringitis)
  • Colitis ulserosa: es una inflamación del intestino grueso y el recto, está caracterizada por la ulseración de las paredes internas del colon. Los síntomas típicos son la diarrea, incluso con sangre, y dolor abdominal. 
(Imagen colon ulseroso)


Bueno, estos son algunos de los ejemplos de las enfermedades producidas por la inflamación, se le llaman enfermedades, ya que la defensa se dirige hacia agentes dañinos como no dañinos, de manera que provocan lesiones en tejidos y órganos sanos. 

Aquí un link de diversas enfermedades autoinmunes, ejemplos, causas, síntomas, entre otras: http://www.enbuenasmanos.com/articulos/muestra.asp?art=1777

domingo, 11 de septiembre de 2011

Un poco de historia...

¿Sabían que en las primeras civilizaciones existen testimonios acerca de la inflamación y su curación?
¿Tan antiguos que aparecieron en papiros egipcios y datan del 3000 a.C?


En Grecia y Roma existieron escritos los cuales describieron 3 o 4 signos cardinales, es decir síntomas fijos, y al paso del tiempo Virchow, describió el quinto, es decir, son 5 signos fijos en la inflamación.
Se identifican como:


  • Tumefacción: Aumento del líquido intersticial (el cual provee nutrientes a las células y elimina sus desechos) y edemas (acumulación de líquido).
Imagen referencia:
                                                       (Edema producido por inflamación)
  • Rubor: Enrojecimiento, debido principalmente a los fenómenos de aumento de presión por vasodilatación (capacidad de vasos o venas de dilatarse)
  • Calor: Aumento de la temperatura de la zona inflamada. Se debe a la vasodilatación y al aumento del consumo local de oxígeno. 
  • Dolor: Este aparece como consecuencia de la liberación de sustancias capaces de provocar la activación de los nociceptores (terminaciones nerviosas libres de neuronas sensitivas primarias), ej: la prostaglandina (conjunto de sustancias de carácter lipídico derivadas de los ácidos grasos).
  • Pérdida o disminución de la función (como su nombre describe)
Después de descubrir los 5 signos cardinales, en el año 1973 el cirujano Hunter destacó que ''La inflamación no es una enfermedad, sino una respuesta inespecífica  que produce un efecto saludable en el organismo en que tiene lugar'', para nosotros hoy en día esta definición es obvia, pero en esos tiempos no se pensaba así. 

Jhon Hunter

De Inflamación a INMUNIDAD INNATA...


Antes de explicar ¿Qué es la Inmunidad Innata?, expliquemos en breve...
¿Qué es el sistema Inmune?

Este sistema está constituido por un amplio rango de mecanismos que el organismo utiliza para defenderse ante cualquier agresión que pueda sufrir este. Es aquí donde aparece la Inmunidad Innata, ya que es la primera fase del sistema inmune, en otras palabras, si existe un agente externo esta se encargará de atacar primero que cualquier otra, y si esta no logra vencer al agente externo pasa a atacar la segunda línea de defensa, y así hasta lograr destruir al agente.

Ahora que entendemos un poco más el sistema inmune, explicaremos detalladamente la Inmunidad Innata.

El sistema inmunitario innato comprende las células y los mecanismos que defienden al huésped de la infección por otros organismos, de forma no específica.
Cuando se refiere de forma NO específica quiere decir que las células del sistema innato reconocen y responden a patógenos de forma genérica (común a muchas especies), y a diferencia del sistema inmune adaptativo, no existe una inmunidad a largo plazo. Es decir, el sistema innato proporciona defensa INMEDIATA contra la infección.

Y para que podamos relacionar la Inflamación con la Inmunidad Innata, debemos entender que la inflamación es la primera respuesta del sistema innato frente a la infección.
La inflamación es estimulada por la liberación de factores químicos y tiene como objetivo crear una barrera física contra la propagación de la infección.



Aquí un pequeño video para entender de manera gráfica como actúa la Inmunidad Innata:



¿Qué es la Inflamación?

La palabra inflamación proviene del Latín Infflamatio, lo cual significa, encender o hacer fuego. Se llama así ya que es la manera de manifestarse en diversas enfermedades.  
La inflamación es una respuesta inespecífica del cuerpo humano frente a los daños que nos puede producir el ambiente, y esta se genera por los agentes inflamatorios.
Si somos dañados por el medio habrá una respuesta inflamatoria, la cual solo ocurrirá en conectivos vascularizados.
El fin de la respuesta inflamatoria frente a algún daño es aislar y destruir al agente dañino, así como también reparar el tejido u órgano que ha sido dañado.  


Debido a las características de la inflamación, se considera un mecanismo de Inmunidad Innata, pero, ¿Qué es la Inmunidad Innata?...